Otra visita al circo

El sábado pasado tuve la oportunidad de ir a otro circo, tratando de olvidar mi anterior experiencia con un grupo de estafadores bajo carpa que se hacian llamar "circo Atayde".
Ahora, procuré ir a un circo en el que estaba seguro que se ofrece un espectáculo de alta calidad, además de ser reconocido a nivel internacional como uno de los mejores. Hablo del Cirque du Soleil.

La gran carpa se ha instalado en parque fundidora en la ciudad de Monterrey, los colores azul y amarillo se ven desde que pasas por el parque, es algo que inevitablemente llama la atención. La carpa es realmente grande, y en vez de ser sólo una, es todo un complejo circense instalado en el parque, ya que cuenta con area de souvenirs, snacks e incluso un bar, además de tener sus propios baños con agua corriente y ventilación.

Los precios son un poco altos, ya que iban desde los $400°° hasta los $1500°°, pero en realidad es un espectáculo que vale la pena ver.

Como se sabe, Cirque du Soleil tiene varios circos, como el Saltimbanco y el Dralión; esta vez tocó a Quidam venir, mostrando una historia un poco más sombria a comparación a lo que estamos acostumbrados a ver, ya que dentro de todas las demostraciones acrobaticas y que muestran una gran fortaleza y disciplina por parte de los actores del circo, también vemos una historia, la de una pequeña niña llamada Zoé, que vive sin atención de sus padres y sumida en la tristeza, hasta que un día, de la nada, llega un extraño a su casa, un hombre alto, sin cabeza, que lleva en una mano una sombrilla y en la otra un sombrero, el cual deja en manos de Zoé, y es en el momento que ella usa el sombrero, cuando la magia de Quidam empieza.

Indudablemente es un circo que vale la pena ver, pero sólo si se tiene criterio y un poco de cabeza para entender las cosas, ya que algunos podrían creer que por estar bajo una carpa todo debe ser gracioso, o por estar en un circo todo debe ser brincos y piruetas; como pude ver cuando fui, ya que pude escuchar la opinión de algunas personas a las que se les hizo muy simple, así como escuché gente reir en un momento de nostalgia en algún acto; también hubieron quienes aplaudian cada vez que no había música, aunque esto significara que era un momento de tensión en el acto, no de aplausos. También hubo quienes tomaban sus cámaras o sus celulares y hacían realmente molesto el momento con sus pantallas iluminadas, aún cuando se había dicho que estaba estrictamente prohibido tener celulares prendidos o tomar cualquier tipo de fotografía o video. Afortunadamente contaba el circo con un staff que regañaba a esa gente y los hacían apagar sus aparatos.

Todo fue muy puntual, empezó a la hora que estaba programada y después del intermedio también se reanudó el espectáculo a la hora prometida, aunque como siempre, hubo gente que llegaba tarde y estorbaba a la vista de los demás.

En conclusión, Quidam, de Cirque du Soleil es una obra magnífica, por favor vayan todos a verlo, ya que a pesar del precio, vale la pena verlo en vivo, para poder aplaudir con toda el alma a un espectáculo tan bien estructurado, con una historia tan profunda y nostalgica, con un final feliz y con una invitación a reflexionar y ser mejores personas. Solamente lleguen temprano, apaguen sus camaras, celulares y cualquier otro aparato que pueda llegar a molestar y disfruten la función, tratando de entenderlo todo.

Si lo que quieren es llevar un recuerdo, compren el DVD, vale la pena, ya que tiene muy buenas tomas, además de tener el audio masterizado.