Mi cochera

Desde que somos pequeños se nos enseñan valores, técnicas de convivencia social que hacen mas ameno el existir en esta ciudad, o al menos eso es lo que se espera de los padres de familia, así como se espera que ellos mismos hayan recibido esta formación anteriormente.

Parte de estos valores incluye el respeto a la propiedad de otras personas, ya que como todos, tienen derecho a disfrutar de sus cosas sin que nadie se los impida.

Pero como siempre, hay gente que al ser criada con la misma educación con la que se adiestra a un perro, no conoce un límite para su voluntad, disponiendo de todo como si no hubiese ningún tipo de problema.

Y aunque podemos evitar que esta gente de poca educación y aún menos inteligencia use nuestras cosas, hay una situación que todos los que tenemos casa, cochera y carro hemos sufrido, y esto es la gente que se estaciona en nuestras cocheras.

Después de un día difícil en las calles de nuestra ciudad, en las que tenemos que esquivar a cuanta persona se le ocurre cruzarse en nuestro camino, a cuantos policías tratan de inventar multas para comprarse un refrigerio y en general conducir por las roídas, carcomidas e improvisadas vialidades de nuestra ciudad, que están bajo alguna construcción, reparación o simplemente son viejas; lo que queremos es llegar a nuestra casa tranquilos, al único lugar en el que realmente podemos deshacernos del estrés para descansar aunque sea un momento. Pero a veces hasta el simple hecho de querer llegar a nuestras casas se convierte en un reto, ya que tenemos que enfrentarnos con que al llegar, alguien creyó en su limitada inteligencia que sería buena idea estacionarse en nuestra cochera, y que el anuncio que tenemos (grande, con letras marcadas y un símbolo rojo de no estacionarse) es sólo un consejo que cada quien sigue según su voluntad.

Por esto, y a causa de que no existe realmente una sanción que haga que toda esta gente aprenda a respetar la propiedad, los cansados y hartos conductores dueños de cocheras acosadas han recurrido a actos igual de infames que el acto de bloquear una salida ajena, como lo es el ponchar llantas, o rociar cualquier tipo de liquido corrosivo para la pintura de los carros, para decolorar la pintura o incluso para deteriorar la carrocería de los vehículos obstructores del paso, para que aprendan la lección, lo malo es que es tanta esta gente que ninguna medida que se pueda llegar a tomar es suficiente, ya que siempre que hagamos que alguien no vuelva a estacionarse en la cochera, alguien más llegará pensando que hay un lugar libre.

Algunas personas han tomado una medida legal para evitar que esta gente le bloquee el paso, esta alternativa es pagar a municipio para hacer un "exclusivo", en el que sólo la persona dueña de éste puede estacionarse ahí. Pero como lo mencioné anteriormente, no existe una sanción real, por lo que en caso de tener un intruso tenemos que hablar a la policía, esperar a que esta llegue (si no llegan a tiempo cuando se necesita que impongan orden imagínese usted lo pronto que llegaran por una "trivialidad" como esta), y si es que la persona está ahí todavía, se le impondrá una multa. Parece entonces que como animales, el simple hecho de ver la banqueta de un color brillante tiene que ser suficiente para ahuyentar a esta gente, ya que si aún viendo un matiz que en la naturaleza significa "peligro" deciden estacionar su vehículo ahí, estamos prácticamente derrotados.

La gente con cochera no tiene que recurrir a esta práctica en la que sólo se pierde dinero para poder conservar su lugar libre de intrusos, ya que nuestro código civil menciona que se deben dejar libres las entradas y salidas de los autos. Por lo tanto el que usted tenga su cochera siempre disponible no es una necedad si no un derecho que usted es libre de ejercer en toda su extensión, así que para nada tiene razón la gente ignorante y de mentalidad retraída que cuando usted los invita a mover su automóvil le dicen que no tienen que hacerlo por que están en la calle (a donde pensarán que van los carros cuando salen de la cochera).

El tener siempre libre nuestra vía de salida no es solamente una petición que se pone con un letrero enorme que nada más la gente sin inteligencia no respeta, si no una necesidad total, ya que así como tenemos que salir diariamente a nuestras obligaciones, puede que algún día tengamos una emergencia, en la que tengamos que salir rápido, ya sea alguna cuestión monetaria, moral o de salud que no pueda esperar so pena de perder algo.

Dejando las salidas libres podemos evitar accidentes, y apoyamos una vialidad más fluida, además de evitar que nos tachen de personas que no saben leer o que no tienen valores.

Si usted es una de las personas de las que hablo y no le importa obstruir una salida, ya sabe lo que pienso, y pensamos muchas personas; para que cambie su forma de pensar sólo imagine que por su culpa, al estar bloqueando una cochera, no puede salir una persona de su casa para llevar a alguien más al hospital de urgencia, y esta persona muere gracias a su falta de cuidado.

O mejor aún, imagine que su madre está enferma, y al querer salir usted de su casa se encuentra con que es imposible gracias a algún otro vehículo bloqueando su salida, por consecuente su madre muere.

Hace falta ser falto de inteligencia para hacer tan marcada falta de respeto, realmente son personas que carecen de facultades para vivir en sociedad y creen que pueden disponer de bienes ajenos a su antojo.

Así que, cuando vea a alguien estacionarse en alguna cochera, téngale lástima, seguramente de niño le pegaban sus padres, lo mantuvieron encerrado en un sótano o simplemente no fue a la escuela (y aún así hay gente con estas características que sabe respetar, así que el motivo de este acto es subjetivo).

Aprendamos a respetar, y si no respetamos, lo más tonto que podemos hacer es exigir algo.